La existencia de trabajadores que ejecutan sus labores por medio de las Empresas que administran Plataformas Virtuales (EPV) y aplicaciones (Apps) en dispositivos móviles, a la vez que ha dejado de ser una novedad para constituirse en una realidad tangible, también ha implicado un reto a las instituciones tradicionales del Derecho del Trabajo y la Seguridad Social, en tanto las características del servicio prestado no encuadra en las categorías históricas que tipifican el contrato de trabajo y el trabajo independiente.
La aparición de las EPV viene precedida de un vertiginoso y universal proceso de innovación tecnológica; facilitado por el desarrollo de la internet y el acceso masivo a los dispositivos móviles y sus Apps. En este escenario, resurge la discusión cíclica, de si estas nuevas tecnologías acabarán por afectar los puestos de trabajo de la forma en la que actualmente los conocemos y si ello nos llevará a las sabidas apologías sobre el fin del trabajo.